17.11.05

Trabajos















Fui niño. En el patio de la escuela
tuve el umbral de una puerta donde en los recreos
me sentaba y leía solitario. A veces miraba el cielo
y las nubes eran gigantes que caían sobre mí y me aplastaban.
Hoy nadie me diría niño. Al tomar el ladrillo
y depositarlo sobre la mezcla, al trazar la línea en el plano,
al firmar documentos creo riqueza y soy compensado por ello.
Mas todavía busco la soledad y me olvido en libros.
El paso del tiempo no enseña, apenas si me golpea
con su vara para domarme y volverme tímido.
El trabajo aja las manos. El calor endurece la espalda.
En invierno las heridas no cicatrizan, se rajan
volviéndose cada vez más profundas.
La cal se entremete en ellas y el ardor
es tanto que se olvida.
También el borde del papel lastima
dejando heridas invisibles que con suspenso
se van poblando de sangre. Todas las heridas dejan cicatrices.
Cada día se ensaña conmigo, y al irse se lleva algo.
Poco dejan. Al verme en el espejo nunca me encuentro igual.
La carne se vence, los dientes se caen, el cabello pierde su color
y me abandona. Por dentro me voy pudriendo.
Sólo puedo dormir cuando tengo los músculos agotados
por el trabajo. Mirándolas con calma
esas nubes todavía me asustan. El paraíso se ha perdido.

8 comentarios:

Lucas Centurión dijo...

la rutina deja la peor herida...no cicatriza

principio de incertidumbre dijo...

¡Poesía Descremada!!!!!!


No sé si le conté que este poema lo imagino con "Quién me ha robado el mes de Abril" de fondo.

"En la posada del fracaso,
donde no hay consuelo ni ascensor,
el desamparo y la humedad
comparten colchón
y cuando, por la calle,
pasa la vida, como un huracán,
el hombre del traje gris
saca un sucio calendario del
bolsillo y grita:

¿Quién me ha robado el mes de abril?
¿Pero cómo pudo sucederme a mí?
¿Quién me ha robado el mes de abril?
Lo guardaba en el cajón
donde guardo el corazón."



Menos mal, que antes nos dio el poema de las nubes; sino era para preocuparse. Luego es tremendo poema.

Hay honor en construir deshaciéndose. Algunas tristezas van forjando cariño...

Nene Tonto dijo...

maravilllloso post!.
La rutina es espantosa. Hundirse en la soledad de un libro es lo más placentero.
Yo tampoco me veo como siempre en el espejo, pero trato me hago creer que así es mejor
saludos

Unknown dijo...

lucas: y uno queda lleno de cicatrices, lleno...

Pdi: sip, me voy descremando...

;)

esa canción es hermosa, sip, de mis preferidas. ahora entiendo porque la cantaba ayer...

...parece que miro demasiado para arriba...

¿construir deshaciendo?? que buena idea. ¿me deja guardarla en mi gaveta de proyectos en elaboración??

¿sabe cuanto la quiero???

munieca: es reconfortante para mi ya... aunque el espectaculo debiera serlo tambien ¿no?

estuve un poco colgado ultimamente... pero ya la he visitado...

Anónimo dijo...

Tus escribes y describes tus vivencias y emociones... yo las dibujo... ambos las hemos vivido intensamente.

Zarat dijo...

hay cicatrices peores que las del trabajo,esas al menos son productivas y te agrada el resultado, peor las que nos deja el dolor u otras personas, esas si que duelen , no tanto por le hecho, sino que cada vez que las miras te recuerdan cuando se hizo la herida, muy cierto eso del papel del poeta o escritor, nosotros somos algo así y en cada verso dejamos un jirón de piel como dice la canción (un corazón tendido al sol), pero en fin hay algunas sales que nos ayudan que son nuestras alegrías, bueno me despido, muchos saludos sr. y para eso no hay reloj, que sirva y aunque lo adelantara, creo que igual tardaría, chau

Xi dijo...

Joder con los espejos. No dan tregua. Son unos despiadados. Si cambian los ojos no hay de qué preocuparse. Lo verdaderamente grave, como dice Benedetti, es que cambie la mirada.

El paraíso puede que esté en otra parte. Con mis carabelas parto de Palos en octubre del año que viene, a ver si descubro mi América metafísica. ¿Alguien quiere venir?

Besos.

Unknown dijo...

JJCustodio: tu dibujas soberbiamente. no se si mis palabras haran eco a tus imágenes...

Akane*: si, tengo muchas cosas tristes...
..perder el pelo no es gran cosa, pero a veces te pone + triste...

..y aguanten los gatos!!!


zarat Tustra: gracias por tus palabras. de veras.

Xime: si, lo verdaderamente grave es que cambie la mirada...

¿en donde hay que anotarse para el viaje??